Por: Alejandro Villaseñor
Como el ave fénix así fue el retorno a las pistas del piloto Ariel Rivera, ya que después de nueve meses de ausencia se presentó en la apertura de la temporada 2024 del Campeonato Ponys Racing Monterrey, que se celebró el pasado domingo 21 de marzo en el Autódromo Monterrey.
Esfuerzo, constancia y horas de mucha presión le valieron a Rivera para lograr el quinto lugar general de la parrilla, tercer lugar de la categoría Pony 2 1800cc y cuarto lugar de la categoría Pony Libre 2000cc., en la justa integrada al Serial Monterrey Racing Cup y dentro del programa de certamen nacional Súper Copa.
“Fin de semana muy emotivo por mi regreso a la pista después de nueve meses de ausencia por motivos que ya muchos conocen, pero que se tornó difícil, ya que el sábado en la calificación una falla de motor nos hizo que nos conformáramos con un octavo general de la parrilla de 12 autos Pony los cuales compartieron pista al correr junto con los Cámaro-Mustang “, explicó Ariel Rivera.
Tras los mandos de su Volkswagen matriculado 22 el piloto regio respondió de esta manera a sus patrocinadores; DEVO Auto Car, Prodynamics, Race & Classic Volks, la Diputada Licenciada Anita González, Mike Rectificaciones, Novedades y Tenis Gaby, Roger Transmissions, Auto Art restauraciones y My DOGtors veterinaria, así como el apoyo de su familia, amigos y seguidores.
Pero dice un dicho que “Rendirse No es Opción” y a la anterior Rivera dijo: “Junto con mi familia decidimos trabajar en el auto toda la noche y parte del domingo tratando de salir adelante con el evento., el motor no coopero pero fue entonces que nuestro compañero de equipo Luis K, que por cuestiones de compromisos no participaría, nos facilitó su motor de menor cilindrada pero serviría para la suma de puntos.
Fue un domingo maratónico y contrarreloj, corriendo y a más de 6,000 revoluciones por minuto para sacar adelante el problema, terminamos y llegamos al autódromo a minutos de arrancar la carrera, la cual no fue fácil por participar con motor no actualizado y de menor cilindrada 1600cc.
Pero con todas las ganas y Dios con nosotros fue que sacamos un resultado positivo, me baje del auto emocionado y llorando de sentimiento por que Dios me permitió estar con mi familia en lo que tanto quiero el automovilismo deportivo”.