Por: Alejandro Villaseñor

Desde 1985 Aguilucho no ha parado de competir en autos de carreras.

Ganó casi todo en México y Europa, pero nunca había manejado un Fórmula

CDMX.- “...Inició en los años 70, lavando carros de carreras. Tenía 10-11 años cuando lavaba el Lotus de Memo Echeverria quien es mi amigo desde entonces”, dijo el famoso “Aguilucho”, Alejandro Aguilar, quien reconoció estar aprendiendo a manejar todavía, pues nunca había conducido un Fórmula Ford.

Pero animado por saber que mejora su conducción en cada vuelta y esto le ayuda con el manejo de los “turismos” en los que es experto, nos platicó de sus inicios ya tras el volante: “...en los ochenta corrí por primera vez con Carlos Turpin en el famoso Caribe 10 y de allí subí al primer tubular que fabricó Aaron Ponce con Fernando Couto, Ricardo Acosta y Jorge Castellá, con ese auto logramos el tercer lugar en las 24 horas de México”.

“No sé por qué se fijó en mí, pero José Miguel Gallo me invitó como su navegante siendo el campeón nacional. Desde entonces corrí todas las carreras de rallies y logré el Campeonato Nacional de Navegantes en la categoría A en 1997, pero en esos diez años gané muchos rallies como navegante. 

Luego, ya como piloto estuve en el equipo Texaco hasta el año 2000”. Posteriormente, el Aguilucho dejó el rallismo después de que su gran amigo, Bernardo Obregón falleciera en “La Carrera Panamericana”.

Subió a los Trans-Am de aquella exitosa Copa Corona, “...en el equipo Gigante”, recuerda... cuando conseguí el patrocinio de los famosos Chocolates Toblerone, participamos en todas las categorías del momento: Reto Dodge, Copa Corona, Nauticopas (motonáutica), Motocicletas, Camionetas Pick Ups, que sigo manteniendo al momento. En Superturismos, ganamos con varios pilotos como Rubén García y Rubén Rovelo, entre muchos otros”.

El Aguilucho tiene una estrecha relación con Europa, vivió y compitió en el viejo continente por 7 años con tantas satisfacciones como él nos platica: “Partí a Alemania para participar en el Campeonato Alemán en la GT durante 7 años”, dijo el también famoso dentista, quien acepta que sus mejores momentos y éxitos llegarían a su regreso. 

“En el 2014 regresé a México y formé con Roberto Fernández el que ha sido uno de los equipos más ganadores en este país, el BFR (Bobby Fernández Racing), con el que ganamos en todos los campeonatos en los que participamos, campeonatos de equipos, de pilotos”, este poderoso equipo ganó cuatro veces las 24 horas en absolutos, incluso participé en NASCAR México en 2017 y actualmente corro en los Superturismos Tapatíos, en donde acabo de ganar las dos últimas carreras”.

Con 5 campeonatos en Superturismos con el BFR entre 2016 a 2020 y tantos años en las pistas, el Aguilucho no puede decirnos con exactitud cuántas veces levantó un trofeo en el podio, pero calcula que fue en más de 100 carreras.

EL SALTO A LOS FÓRMULAS

Ser un especialista en una disciplina, a veces no te da tiempo de conocer otras formas de automovilismo, pero el Aguilucho tomó el reto impulsado por sus fuertes lazos con Memo Echeverría y Memo Rojas, con este último formó el equipo “KEMM Racing” de la Fórmula Ford Vintage-SpeedFest para probar por primera vez un auto tipo Fórmula.

“Para mí, inicialmente, correr en la Fórmula Ford Vintage, representaba correr con mis amigos, divertirnos; pero aprender a manejar un Fórmula ha sido toda una experiencia, la categoría ahora es muy competitiva y ha costado aprender”, dice con sincera modestia quien recientemente tuvo un fuerte contacto con el muro en su Crossle 50F, pero todo esto le ha permitido manejar con más confianza los autos turismo como nos comenta: 

“… bajándome del turismo le digo a mi ingeniero que entro con más confianza, me siento protegido a diferencia del Fórmula y sí es una ventaja venida del manejo del FF Vintage”.

El manejo del Aguilucho ha subido de nivel, incluso después del fuerte accidente en junio, en Querétaro, comprobando lo que ya han dicho los grandes, que manejar estos autos que fueron la histórica antesala de la Fórmula 1, permite al piloto aprender a manejar “fino”, el Aguilucho lo sabe y tiene la experiencia suficiente para ser humilde y aceptar que aún está aprendiendo a conducir en Fórmulas; cuenta con la suerte de hacerlo al lado de las grandes leyendas de nuestro deporte como su coequipero Memo Rojas, su maestro Memo Echeverría, Enrique Contreras, y Tomas López Rocha, entre otros campeones que le dieron forma a nuestro deporte.

El campeonato de la Fórmula Ford Vintage-SpeedFest, ha conseguido en dos años, crecer a más de 20 joyas de colección, en parte, gracias a que el equipo del Aguilucho creció también, ahora son tres autos con la incorporación al KEMM Racing del experimentado Rodrigo Echeverria, quien ya demostró en su presentación que puede ganar en cualquier categoría.