Por: Alejandro Villaseñor
La carrera de debut de padre e hijo en las 12 Horas de Sebring duró poco menos de dos horas y media, luego que el auto #81 del DragonSpeed se viera afectado por un incidente múltiple frente a él en la curva uno del Sebring International Raceway, dejando fuera a Juan Pablo y Sebastián Montoya, así como a Henrik Hedman.
El piloto de Escudería Telmex Telcel y Claro, el colombo-estadounidense Sebastián Montoya, debutaba así en los Prototipos de la serie IMSA, nada menos que haciendo equipo con su padre, el ex F1 Juan Pablo Montoya, y el patrón del equipo, Henrik Hedman, quien no pudo realzar sus tandas.
La tripleta había causado una gran expectativa porque por vez primera padre e hijo competirían juntos en el equipo DragonSpeed de Henrik Hedman, sobre todo luego de calificarse segundos en su categoría para tomar la partida en esta edición 2022 de las 12 Horas de Sebring.
Precisamente sería el joven Sebastián Montoya quien tuvo el privilegio de arrancar la carrera de enduro, manteniendo un gran paso y performance para establecer un ritmo que lo mantuvo entre el grupo puntero de la clase LMP2.
Más tarde llegaría el turno del ex F1 Juan Pablo Montoya, quien consiguió llevar el auto #81 a liderar la carrera en busca de un resonante triunfo. Sin embargo, los imponderables aparecieron: el prototipo #81 no pudo evitar salvar un choque múltiple en la curva uno del trazado, tocándose con uno de los vehículos accidentados y posteriormente teniendo que abandonar.
Tras el incidente, Sebastián dijo: “Por supuesto nada de esto estaba en los planes. Mi papá hizo lo que debía. Nos desanimamos un poco con esto, pero también nos quedamos satisfechos por el gran trabajo que hizo el equipo y nosotros como pilotos”.
